El problema de la verdad

El problema de la Verdad

En la entrada de esta semana vamos analizar “El problema de la Verdad” contextualizandola en la situación actual de la sociedad, a partir del capítulo 6 Verdad y Conocimiento de Josep María Terricabras.

El autor comienza hablando del pluralismo ideológico y político que vivimos en la actualidad, con ello se refiere que ninguna instancia de ningún ámbito impone sus principios, doctrinas u opiniones, por ello es plural y es característica de la democracia por que si pueden expresar sus puntos de vista. 

Este pluralismo lleva a una nueva percepción de la verdad, que esta no es monolítica, que podemos buscarla y descubrirla en diversos lados y crear la verdad individual. En si, no existe una lista predeterminada de criterios para saber quién tiene la razón ya que cada quién procesa y ve con ojo crítico a su manera la información que recibe. En épocas anteriores había guías en el camino de la razón que eran los filósofos, sin embargo, en la actualidad estos ya no tienen tanta influencia. Concuerdo con el autor en el punto de que esto es positivo, ya que se ha dado pie a un cuestionamiento individual y por ende de más creatividad pero que también estos guías han sido reemplazados por los medios de comunicación, políticos, etc. 

En esta búsqueda de la verdad nos podemos plantear la pregunta ¿quién tiene la razón?, para definir ello se puede llegar al consenso de ciertos criterios, pero como comenté anteriormente, no hay un instructivo a seguir. Están los claros, como los relojes que indican la hora, o los difíciles que tal vez se pueda acudir a profesionales de prestigio. La importancia radica en delimitar el problema. Normalmente se apela a figuras de autoridad cuando estos son sencillos, pero cuando no existe esta posibilidad primero se tienen que sentar las bases a partir de las cuales se analizará el problema o el objeto de análisis/discusión tomando en cuenta que siempre existe el proceso intersubjetivo de cada quién, en la valoración individual.

En mi opinión, llegar a la “verdad” o a nuestra propia verdad es un constante proceso de informarnos a través de discusiones con personas que sabemos que tienen conocimiento sobre el tema a tratar, de informarnos a través de diferentes fuentes para que como expresa el autor se complemente “lo que ya se sabía pero no de aquel modo” y estar conscientes que el resultado de todo este proceso es “la verdad desde mi propio punto de vista”.

Fuente: Periódico Opción

Dependiendo de los criterios que utilicemos es el tipo de verdad que tendremos. Estar concientes que la “Verdad” es simplemente otro concepto inventado por los seres humanos y que existen diferentes versiones de la misma. Decir que la verdad es relativa es estar de acuerdo en que no se sabe que es verdad y que es mentira, que todas las opiniones son iguales y buenas. Lo que debemos hacer es examinar en lo individual las alternativas que tenemos sobre esa verdad. Decimos que es relacional cuando lo que se esta poniendo en cuestión se puede relacionar/comparar con algún criterio o parámetro. 

A lo largo de la lectura pensé mucho en la diferencia entre la educación en México y en Corea del Sur. Con la reforma educativa se  nos invita a los estudiantes mexicanos/as a realizar una mayor reflexión del conocimiento adquirido, a cuestionar aquello que el profesor esta planteando a través de preguntas que abiertamente tenemos permitido a realizar. Al contrario, en Corea del Sur las clases siguen siendo de estilo catedrático dónde el profesor da clases de 2 horas de duración y la participación del estudiante s mínima, al igual que si se le cuestiona la información transmitida al profesor, esto es visto como de mala educación. Con el ejemplo anterior podemos ver como nuestros conocimientos y por ende nuestra verdad están sujetos al contexto social, cultural, político, histórico, entre otros en el que nos desarrollamos.

Referencia Josep María Terricabras. Verdad y Conocimiento, Capítulo 6.